sábado, 26 de junio de 2010

Enfoques cooperativos; Hoy: “el salario del miedo”


Por José Yorg, el cooperario

El salario del miedo es una película basada en la novela de Georges Arnaud y realizada en 1953 por el director francés Henri-Georges Clouzot, protagonizado por Charles Vanel, Yves Montand, Peter Van Eyck, Folco Lulli, Vera Clouzot, William Tubos, Darío Moreno, Jo Dest, entre otros, que aborda la temática humana en ambientes desolados, “de desigualdad económica y social entre lo que se ha venido a llamar el primer mundo y el tercer mundo. Pobreza, hambre, paro, desesperación y una necesidad de huir”. (http://www.taringa.net/posts/tv-peliculas-series/1449435/El-Salario-del-Miedo___.html)

Sin ninguna duda el titulo tiene una connotación impactante y actual en la vida de los trabajadores puesto que vivimos bajo ese designio: el miedo a la pobreza.

El salario sigue siendo una variable económica de ajuste destinado al disciplinamiento más que a otra cosa, y el comentarista de la película lo explica así “Pero podemos ir más allá de la película. ¿Jugarse la vida por un salario es justo? Y ya no me refiero únicamente al hecho de arriesgar la vida realizando determinadas tareas, sino matar por conseguir un trabajo. Es evidente que la desesperación puede ser una fuente de motivación importante. Pero no olvidemos que
se trata de un juego de dos, donde unos se aprovechan de la desesperación de los otros. Eso es precisamente lo que hay detrás de las leyes de la oferta y la demanda aplicadas al salario y al empleo”

Gobiernos que han perdido el rumbo político en cuanto a las aplicaciones de planes de desarrollo con equidad que procuren el bienestar general, sólo atinan a atiborrarse de justificativos en la mentada crisis global sin buscar alternativas.

El trabajador en pleno siglo XXI, siglo de la alta tecnología y la comunicación, siglo de la súper producción y el adelanto científico más extraordinario, sólo encuentra condiciones deplorable en su ámbito de labor y sus derechos, decaídos.

“Eso, evidentemente, lo determina la relación entre la oferta y la demanda. Sin un sistema que proteja y establezca un mínimo de condiciones que garantice un salario justo el trabajador está perdido, ya que la tendencia del empleador ante una abundancia de demandantes de empleo es bajar el salario. Para el empleador, la desesperación del empleado es rentabilidad. Y en la película hay mucha desesperación. En el mundo real también”, nos describe el comentarista.

¿Qué clase de capitalismo vivimos, si mayoritariamente el pueblo no tiene plata en el bolsillo para gastar y así motorizar la economía?

Sin dudas algo está mal, y está tan mal que el daño se observa en la naturaleza, en el mundo, nuestra casa común, nuestro barco que puede ciertamente hundirse en el mar espacial y… nadie se salvará!

Salario bajo arroja al trabajador a una existencia de necesidades continuas cuyas repercusiones son de resultados sociales como el analfabetismo, desnutrición, corrupción y desencanto del modelo democrático, entre otros muchos males.
En medio de esa circunstancia tan nefasta, sin embargo, surge una respuesta: el trabajo asociado cooperativo.

En las cooperativas de trabajo asociado, empresas constituidas de mutua voluntariedad por trabajadores que aportan capital y establecen para sí, estatutariamente el régimen de trabajo y por tanto gestionan sus empresas, asumen responsabilidades de previsión, seguridad social y compensación, y, en virtud a todo ello, no están sujetos a la legislación laboral aplicable a los trabajadores dependientes.

En las cooperativas de trabajo asociado tenemos pues, una oportunidad de humanizar el trabajo y el capital, ambos enfocados a la plena realización del trabajo como expresión artística y provechosa del hombre y la mujer, mejorando consecuentemente el tejido social y económico de la sociedad puesto que instaura esperanza cierta de un mundo mejor y próximo.

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

jueves, 17 de junio de 2010

Enfoques cooperativos; Hoy: “Sobre el daño social de la ausencia pedagógica del cooperativismo en la aulas”.


Por José Yorg, el cooperario.


Si partimos del hecho, demostrado ampliamente, de que la educación cooperativa escolar y universitaria son significativamente relevantes en su aporte en los campos de la formación moral, ética, organizativa y solidaria de educandos, reconocidos en importantes normativas de raigambre constitucional, incluso ligados a tratados internacionales, se logra tener una imagen del daño social que causan los gobiernos que impiden el acto educativo cooperativo en las aulas.

Los gobiernos de cualquier lugar del mundo y del signo ideológico que fueren-debemos remarcarlo- pueden promover o dificultar el desarrollo cooperativo; así mismo pueden alentar o destruir la acción cooperativa; que impidan su establecimiento e incluso pueden declararlo fuera de la ley a las cooperativas, tal como ha hecho el estado fascista-stronista en el pasado reciente.

La relación del Estado con el Movimiento Cooperativo en toda América Latina ha ido advirtiendo cambios políticos con distintas manifestaciones, acorde a un proceso de tiempo y lugar de los acontecimientos científicos, técnicos, políticos, económicos y sociales, hasta llegar a la actualidad, en que ya nadie se atrevería discutir la influencia que estas empresas tienen en el rápido desarrollo de la economía de las naciones.

Nos ilustra con maestría singular el Dr. Erico Panzoni cuando nos afirma que “Las asociaciones populares con fines económicos y sociales, germinan y se nutren en la solidaridad de los grupos que la componen, dentro de un línea de pureza permanente, ayudarse mutuamente, para eliminar las causas que impiden y demoran, una vida mejor.”

De eso y no de otra cosa se trata: de aportar a la construcción de una vida mejor, más digna, más humana, más excelsa, son los fines y metas que persigue la educación cooperativa escolar y universitaria.

Porque consideramos de importancia creciente la difusión del método cooperativo, evitando sus desvirtuaciones artificiosas e interesadas actitudes de ocultamiento por parte de adúlteros, nos valemos del generoso y amplio apoyo del periodismo por quienes sentimos respeto y consideración creciente.

Hemos planteado públicamente que queremos que el “Año Internacional de las cooperativas” (2012) nos encuentre, a gobiernos y cooperativistas mancomunados y con obras realizadas en bien de la comunidad toda.

Desde esta columna; “Enfoques cooperativos” impulsamos con vigor necesario la necesidad de concretar acciones en conjunto entre los gobiernos y el Movimiento Cooperativo, en virtud a la más amplia y plena coincidencia entre sus objetivos: mejoramiento económico y social del pueblo.

Esa es-nos alecciona Panzoni- “La posición sustentada por los pensadores y dirigentes más capacitados del cooperativismo argentino, quienes en sus publicaciones, en presentaciones oficiales y en congresos han abogado por lograr el concurso estatal en aspectos que son vitales para la marcha sostenida y la formación de un vigoroso movimiento cooperativo, con hondas raíces en lo técnico, económico y social.”

Debemos convencernos de manera total de que los gobiernos, en su procura de mejoramiento de la existencia de sus poblaciones, tienen en el cooperativismo su mejor y mayor aliado.

Por eso es que la conducta de los gobiernos queda en evidencia, a partir del fomento o ataque al noble sistema cooperativo, su calificación ya sea como gobierno democrático participativo o por el contrario como gobierno de corte fascista y feudal.

Formosa, lleva por nombre una Provincia de la República argentina, lugar geográfico en el que lo preceptuado por el artículo 5° de su constitución expresa “Los derechos, declaraciones y garantías enumeradas en la Constitución nacional y que esta Constitución da por reproducidos”, se refiere, entre otros al derecho de enseñar y aprender.

Tal derecho-de enseñar y aprender-en la práctica cotidiana por una u otra sin razón, encuentran burocráticas trabas, que impiden el goce de ello. El daño social-educativo cooperativo está establecido en función a ese impedimento.

El daño consiste en privar nada más y nada menos que de conocimientos teóricos-prácticos que conllevan valores, habilidades, capacidades, destrezas organizativas empresariales de autogestión, desarrollar actitudes y aptitudes solidarias de convivencia productiva, y que constituyen saberes distribuidos, socialmente hablando, con alta rentabilidad de recupero.

¡De esos valiosos elementos estamos hablando! El alumno primario al finalizar sus estudios no tendrá esas habilidades, capacidades, destrezas organizativas empresariales de autogestión, el alumno secundario tampoco, y el universitario no poseerá actitudes y aptitudes solidarias de convivencia productiva, y que constituyen saberes distribuidos, socialmente hablando, con alta rentabilidad de recupero.

La nobleza del oficio de enseñar encuentra en la práctica pedagógica cooperativa su máxima expresión.

El acto educativo cooperativo está saturado de amor, de comprensión, de respeto y unidad fraternal, en la búsqueda compartida del crecimiento moral, intelectual y organizativo emancipatorio de los educandos y de los educadores.

Entonces, cabe preguntarse… ¿por qué los gobiernos soslayan a la educación cooperativa escolar y universitaria del sistema formal de la educación puesto que es parte indisoluble de ella?

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

martes, 15 de junio de 2010

Educador cooperativista augura un panorama desolador para las familias formoseñas


*”Profesores destacados en su labor, sin embargo no son atendidos sus justos reclamos”

El educador cooperativista Juan Velázquez auguró hoy “un panorama desolador para las familias formoseñas, en especial a los docentes porque- apuntó- la inflación se come en días el magro salario que percibimos y para peor se ha inaugurado una practica poco clara, es decir, se producen los descuentos mensuales por tandas de docentes y por distintos rubros”.

Ejemplificó Velázquez su afirmación pintando un panorama lacerarte al comentar sobre su propio caso y de sus colegas ya que “desde la administradora de la cartera educativa los docentes sufrimos rebajas de carácter selectivo, es decir, en nuestros salarios y tampoco percibimos la readecuación salarial, que a decir verdad sufrimos una verdadera confiscación, y esto nos lleva a la línea de pobreza-marginal”.

“En nuestro caso-insistió-cumplimos una tarea de mayor responsabilidad y jerarquía en ámbitos académicos, sin embargo, no se nos remunera en consonancia a la normativa que establece esto, sencillamente se soslaya un principio elemental cual es que el salario es de carácter alimentario y entonces el recorte es una apropiación indebida a ello y la justicia debe tutelarlo”.

Detonante de grandes y prolongados conflictos

También presentó su preocupación Velázquez en referencia a que “la educación cooperativa escolar es directamente soslayada pese a su respaldo normativo vigente, y entonces se nos coloca en una situación sumamente injusta y discriminatoria ya que en la realidad nuestra labor y la educación cooperativa en la Provincia de Formosa, están encadenadas”, subrayó.

A este respecto, el educador previó “una subida de las penurias que atravesarán miles de familias para los próximos meses”, y señaló que, “la mala administración actuará como detonante de grandes y prolongados conflictos que, paradojalmente son evitables si se estableciese diálogos de consenso,” cerró muy preocupado.

domingo, 6 de junio de 2010

Enfoques cooperativos; Hoy: “¡Juntad diez personas bajo la concepción de unidad y habrá cooperativismo, por el contrario, juntad diez personas bajo c


Por José Yorg, el cooperario.

En Latinoamérica, se sabe hasta el cansancio, la pobreza es alta por la incapacidad, mejor dicho, por lo perimido y agotadas funciones de las estructuras económicas actuales, incapaces completamente ya de incorporar fuerza laboral al proceso productivo.

Al no modernizar las estructuras y tampoco estimular nuevas y vigorosas formas de organizar la producción, rigurosamente miles y miles de personas aptas y fecundas exceden la demanda de la misma. Esto nos lleva indubitablemente a develar las profundas causas del subdesarrollo y consecuentemente a habilitar un tiempo de debate propositivo.

No es posible seguir con un sistema productivo expulsivo y marginador sin medir las consecuencias, tanto para las personas afectadas, como para la naturaleza misma que en grado sumo se degrada y se vuelve estéril.

Ahora, si lo que queremos es construir una sociedad que tiene como meta el pleno desarrollo humano, el pleno empleo y el bien estar general, debemos pensar en mecanismos de transformación benéficas social y mayoritariamente.

En el contexto analizado, la reforma agraria integral es una vía necesaria y de mucha razonabilidad social y económica. Dar una vuelta de hoja al modo tradicional y caduco de producir, salir del latifundio y avanzar hacia la cooperación agrícola-ganadera industrial.

Pocas veces los medios de comunicación reflejan otras ópticas de pensamientos y así la población se priva de conocer alternativas, felizmente, en nuestro caso, encontramos eco favorable y nuestra columna “Enfoques cooperativos” es generosa y ampliamente difundida, y por ello, nos sentimos en creciente responsabilidad y nuestro agradecimiento es de puro corazón.

Así expuestas las cosas quedamos habilitados para señalar que el cooperativismo sintetiza doctrina y ciencia.

En este punto seguiremos a Rogelio Villegas comenzando en su artículo “Teoría de la cooperación” desde la Revista de la Cooperación Internacional de la ACI cuando nos ilustra convenientemente sobre este importantísimo punto:

“La teoría de la cooperación, como ciencia tiene por tarea explicar lo que es y predecir lo que puede ser y por lo tanto observa la cooperación cooperativa como un fenómeno, de tal manera que puede sacar conclusiones sobre las condiciones en las cuales se da el fenómeno cooperación y cuáles son las tendencias futuras de su desarrollo. Así como el meteorólogo explica en qué condiciones se da el fenómeno lluvia o precipitación pluvial, así al observar el fenómeno de la cooperación y al saber en qué condiciones éste se da, el investigador de la cooperación está en situación de predecir cuándo se dará o cuándo cesará el fenómeno de la cooperación en una sociedad cooperativa.”

“Con estos saberes, está (estamos) en situación de proporcionar las condiciones que permiten organizar con éxito las cooperativas”.

Pues bien, la condición sine qua non es la educación y capacitación para alcanzar la participación responsable y creativa, debemos derrotar al analfabetismo cultural del ciudadano/a que suplica y por el contrario avanzar en la formación del ciudadano/a que se organiza empresarialmente, que autogestiona, que asume decisiones y controla.

Los cooperantes no somos, en modo alguno, meros soñadores, alejados de la realidad, sabemos por estudio y práctica que no es fácil luchar contra los hábitos de pereza y de mezquindades, del sálvense quien pueda, subvalores inculcados y adquiridos en sociedades empobrecidas e injustas.

Otro factor negativo instalado en nuestras sociedades latinoamericanas, que se da, a la vuelta a procesos democráticos, es que se hace común observar en las sociedades un gran nivel de incredulidad hacia la política y de los políticos y desarrollan actitudes de gran apatía, y es que la gente está cansada y fastidiada de promesas incumplidas. Es la hora de asumir autogestión.

Nuestra experiencia de más de dieciocho años en el oficio de enseñar cooperativismo nos permite afirmar categóricamente que las personas y los pueblos tienen potencialidades y experiencias valiosas que encuentran fecundos causes dentro de organizaciones que facilitan la participación compartida, pues liberan y potencian en el trabajo libre.

En el transcurrir del trabajo dirigido y compartido, las personas resuelven sus problemas comunes, sean falta de alimentación, empleo, educación u otros, se produce en ellos una transformación benéfica, pues incrementan su autoconfianza, se valoran y se respetan mutuamente y así inauguran un ciclo nuevo y esperanzador. Aprenden con la guía de los principios y valores del poder de la cooperación.

De allí, nuestro celo en cuidar que no existan desvirtuaciones perjudiciales al método cooperativo y se conozca y aprenda popularmente cómo llevar adelante procesos de aprendizajes cooperativos, puesto que así garantizamos un genuino proceso educativo de transformación de las personas que, de ser pasivos sujetos, pasan a convertirse en capaces de construir su propio destino.

Por ello encontramos certeza en la formula simple, pero definitiva de: “¡Juntad diez personas bajo la concepción de unidad y habrá cooperativismo, por el contrario, juntad diez personas bajo concepción individualista y habrá esclavitud!

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

miércoles, 2 de junio de 2010

Lanzaron curso virtual para docentes en cooperativismo


La contadora Ana María Ramírez Zarza, comunicó que “se puso en marcha la segunda etapa de capacitación en cooperativismo denominado “Orientación cooperativa”,a distancia por iniciativa e intermedio del Portal DiarioClorinda.com y Radio Sensación de la ciudad de Clorinda, prosiguiendo así un proceso educativo virtual que, sin dudas, cubrirá una sentida necesidad”.

“En efecto-señaló la profesional- esta iniciativa educativa apunta en esta segunda edición, dirigir su cobertura hacia el sector docente de todos los niveles y modalidades, cumpliendo así lo estipulado en el articulo N° 90 de la ley nacional de educación en referencia a la capacitación docente sobre cooperativismo escolar, en concordancia con los principios y valores establecidos en la Ley N° 16.583 y sus reglamentaciones,”.

Especificó Ramírez Zarza que “tecnológica, pedagógica y didácticamente el Equipo presidido por el Lic. José Yorg pone a disposición de los y las docentes interesadas Boletines coleccionables, con la finalidad de que sea un vehiculo de información que propicie la sana y creativa construcción de los saberes cooperativos para ejercitarlos en el aula y de tal modo contribuir con una formación moral, organizativa y solidaria de los educandos”.

Capacitación interactiva


Explicitó la experta en asuntos cooperativos que “la capacitación interactiva a distancia se desarrolla bajo un modelo de tutoría y acompañamiento a los docentes para asesorarlos en sus desempeños individuales y cooperativos de aprendizajes y puesta en práctica en el aula, sustentados en una relación directa en el proceso de llevar los contenidos expuestos semanalmente en el Portal a la acción en su práctica pedagógica”.

“A esa primera etapa-apuntó Ramírez Zarza- de la educación a distancia que realizáramos el año pasado con tanto éxito, reconocido además por medio de una Declaración de Interés desde el H. Concejo Deliberante de la Ciudad de Clorinda, le sigue esta segunda generación virtual consolidando y afianzando el prestigio de esta modalidad que implica el compromiso de elaborar trabajos de alta calidad académica, invitando en consecuencia a participar del mismo”, concluyó.