miércoles, 25 de julio de 2012

Programa Radial “Hablemos de Cooperativas, una empresa que todos debemos conocer”

Espacio de construcción de saberes en bien de todos y todas.

Cooperativismo, cultura, política y actualidad forman parte del Curso que ahora se emite por FM 103.5 Radio La Corneta, orientado a pensar transformadoramente la realidad formoseña, Latinoamericana y mundial.

Por invitación especial de su director Sr. Carlos Varela, miembros de TECNICOOP encaran un programa de educación cooperativa de una hora de duración los días martes de 17 Hs. A 18 Hs., y la puesta en el Portal de los correspondientes boletines coleccionables para quienes deseen bajarlo y tenerlos para estudiarlos.

Al respecto dijo la Cra. Ana María Ramírez, una de los responsables del curso que “Radio La Corneta se caracteriza por la particularidad de su estilo crítico, franco y directo sobre las diversas problemáticas que se presentan en nuestra provincia y la rapidez de las informaciones, también en ella se abren espacios a la educación como es el caso de “Hablemos de Cooperativas, una empresa que todos debemos conocer”.

“Nosotros valoramos mucho esta oportunidad que nos brindan-expuso a su turno el Cr. Luli Aquino el otro responsable del dictado del curso- y pretendemos generar un espacio de construcción de saberes en bien de todas y todos los formoseños, y también del mundo hispano parlante porque vamos por internet”.

Ambos profesionales coincidieron en señalar que “Hablemos de Cooperativas” tiene una dinámica propia que consiste en conjugar los contenidos propios del cooperativismo con la realidad actual y lo hacemos parados desde una trayectoria de lucha, esfuerzo y entrega al mejoramiento humano, abriendo el micrófono al radio escucha para que opine, pregunte o disienta con nosotros libremente”.

De tal manera en las audiciones venideras se desarrollarán temas específicos de cooperativismo, pero también de cultura, política, actualidad, noticias y reflexiones y muchos ingredientes que conforman el formato del Curso esperando aportar a la comunidad un programa alternativo útil.











Enfoques cooperativos; Hoy: “Algunos desafíos de las cooperativas agrarias brasileñas”







Por José Yorg, el cooperario.

A invitación de mi amiga Joana D^arc Nogueira de São Paulo, consultora sobre desarrollo financiero y ligada al sector cooperativo, me atrevo a opinar tímida y respetuosamente sobre algunos desafíos de las cooperativas agrarias brasileñas.

En verdad, más allá de las peculiaridades que presenta el sector cooperativo brasileño, no escapa mucho a la realidad de sus pares latinoamericanos, en razón a su convivencia en ambientes claramente hostiles a la cooperación como modelo productivo superador.

Ese ambiente al que referimos es lo que se da en llamar la globalización de los mercados y dentro de éste los agroalimentarios que impuso un mecanismo que vincula producción con agregado de valor, cadenas productivas que conllevan especializaciones de alto  nivel e influencia en que el capital financiero, de trabajo, social, etc., confluyen para dinamizarlo, por tanto, aquí encontramos a las grandes cooperativas integradas en la exportación de commodities.


Los productores cooperativizados de bienes primarios orientados al mercado interno, acotados por cierto en sus actividades, por diversas motivaciones alcanzan reducidos beneficios.

El papel del Estado hacia estos dos segmentos cooperativos es francamente dispar y tiene sus luces y sombras. Baste recordar las palabras del Dr. Roberto Mangabeira Unger, ex ministro de Asuntos Estratégicos de Brasil cuando describió el ambiente demorado en que se desenvuelven las cooperativas: “Brasil hierve de vitalidad emprendedora y creativa, pero está sujeto por una camisa de fuerza de instituciones, prácticas e ideas que suprimen esa vitalidad, en lugar de instrumentalizarla”.

No puedo en este punto dejar de repetir lo que afirmé en otro articulo sobre esta cuestión decisiva: “Coincido ampliamente con el Sr. Ministro Roberto Mangabeira Unger- cuando éste afirmó que “el cooperativismo es el mejor camino a seguir para que Brasil dé el salto adelante, que puede y necesita dar, sobre todo teniendo en cuenta la actual crisis internacional.”
 
Quebrar esa camisa de fuerza que impide o frena el desarrollo económico brasileño y en especial a las cooperativas, es el mayor desafío, y ello se logrará si se alcanza juntar suficiente poder político que incida decididamente en las decisiones favorables que desde el gobierno deben tomar.


Por tanto, esa brecha entre cooperativas poderosas y cooperativas modestas debe ser aniquilada a partir de un proceso de integración institucional y empresaria que beneficie a ambas partes y de tal modo se visualice en el contexto político con mayor presencia e influencia.

Sin dudas en el sentido apuntado urge que las cooperativas capaciten a sus miembros y gerentes para que sean eficientes a la hora de afrontar los desafíos de este tipo de alianzas estratégicas organizacional con un enfoque de desarrollo equilibrado y equitativo de la agricultura sustentable, orientado, tanto al mercado interno, como externo.

El cooperativismo no puede ni debe replicar las distorsiones de las empresas de capital en el mercado que anulan a sus pares de menor capacidad empresarial. Por el contrario, y en función a sus valores y principios cooperativos deben apresurar con vigor necesario un modelo de cooperación dinámica integradora mostrando así la fortaleza que lo caracteriza.

Tal vez muy pronto Europa requerirá grandes volúmenes de alimentos en razón a la crisis aguda y crónica que atraviesan y ello se materializará también como un desafío a satisfacer por Brasil y en especial por sus cooperativas agrarias.


Valoro repetidamente las expresiones de Roberto Mangabeira Unger, quien afirmó que “el país tiene interés estratégico en que esa experiencia ejemplar del cooperativismo agrícola supere los problemas que enfrenta y pueda ayudar a señalar el camino que el país debe seguir, y el Estado brasileño debe llevar adelante una revolución, y que el terreno más fértil para llevarla a cabo es en la agricultura, en particular, en la cooperativa.”

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

Enfoques cooperativos; Hoy: “Reforma agraria con base cooperativa en Paraguay”







“Único camino que tiene el pueblo y Gobierno para planificar democráticamente su economía”



Por José Yorg, el cooperario


Es una medida política aplicada por el Gobierno para transformar las relaciones agrarias injustas y las formas de propiedad de la tierra con el propósito de superar el retraso económico del pequeño productor, como también incorporar, dinámicamente al sector denominado “sin tierra” y organizar los predios sobre principios cooperativos.

Se procura originar un modelo de Desarrollo Agropecuario Sustentable con Base Cooperativa, donde se priorice el capital social del talento humano, a través de la educación, capacitación y participación como métodos fundamentales para la incubación del bienestar agrupado.

A través de la transmisión y construcción de conocimientos relevantes en temas empresariales de ultima generación vinculada a valores y principios del cooperativismo se espera alcanzar el perfil de un productor altamente capaz de superar por si mismo y con la ayuda mutua las insuficiencias y problemas que les dificultan encarar con eficacia y eficiencia sus actividades individualmente.

La Reforma Agraria es entendida como una medida política estatal en razón a la comprensión con exactitud de los sanos principios del desarrollo económico que exigen destrabar las distorsiones de un modelo de propietaria productiva heredadas del pasado que en su momento funcionaron satisfactoriamente ,sin embargo, se encuentran hoy visiblemente agotadas en sus posibilidades de proseguir con éxito dado que las actuales relaciones establecidas por un mundo globalizado impone nuevas reglas y formas de ofertas y demandas productivas realmente dinámicas y que aquellas del pretérito carecen.

Se entiende esta medida política en procura de ejecución efectiva, aquella sostenida por los principios de la ciencia económica y las circunstancias en que se desenvuelven, una necesaria adecuación territorial productiva precisa, calmante y oportuna, tal como nos alecciona la experiencia norteamericana y su ulterior desarrollo agropecuario encarado en el siglo XIX, en que los norteños industrialistas, frente a los sureños, cuyo modelo productivo era esclavista y latifundista se vieron en la necesidad de modificarla vía guerra.

Se instituyó una ley de colonización del oeste que estableció un tamaño de propiedad máxima de alrededor de 100 acres (89 hectáreas) por familia sobre las tierras públicas, garantizando el acceso más democrático a todos los que quisieran trabajar la tierra, de forma familiar*.

*http://www.monografias.com/trabajos15/reforma-agraria/reforma-agraria.shtml)

Sostenemos pues una posición realista basada en la ciencia económica y alejada de toda connotación ideológica que pudiera generar enojos estériles. El desarrollo es producto de una seria planificación estratégica de crecimiento económico con equidad e inclusión social.


A esta altura de nuestra exposición sentimos –como muchas veces-que debemos recurrir a nuestro gran amigo y genial maestro de maestros cooperativistas, el Dr. Dr. Erico E. Panzoni cuando afirma: “El mérito de la cooperación agraria, radica en las posibilidades que se le ofrecen al agricultor de iniciar empresas que parecen prohibitivas para él, merced a una fórmula combinada de asociación voluntaria y método cooperativo, que es él conjunto de principios y normas que confieren personalidad al cooperativismo.”


*“El fin primario de la institución cooperativa, es mejorar la condición económica de sus miembros; más por los medios que pone en la obra, las cualidades que exige a sus miembros; y que desarrolla en ellos, mira y llega muy lejos. El fin de la cooperativa es en este caso el de hacer hombres, pero hombres responsables y solidarios, para que cada uno de ellos se eleve hasta una plena vida personal y todos juntos hacia una vida social amplia” (* Dr. Fauquet)


“Hay en los países subdesarrollados (y el Paraguay es un país subdesarrollado) un defecto de organización, y si nosotros insistimos en la solución cooperativa, es debido a que la consideramos el único camino que tiene el pueblo (y el Gobierno) para planificar democráticamente su economía, para asegurar una perfecta distribución de sus ingresos para vivir feliz, dentro de un clima de libertad”.


Estas aseveraciones del Dr. Panzoni nos liberan de toda argumentación a favor de la cooperación agraria puesto que son-a nuestro juicio-magistralmente categóricas.


¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!









Yorg: “el Gobierno y TECNICOOP tienen que aprobar materias pendientes”


Educación cooperativa escolar



El educador cooperativo José Yorg, expresó que “en el marco del “Año Internacional de las Cooperativas” hemos realizado recientemente un examen de los logros, avances y retrocesos del cooperativismo en Formosa y, entre muchas cosas encontramos que, tanto el Gobierno de la Provincia como nosotros, tenemos materias pendientes que aprobar en materia educativa cooperativa escolar y universitaria”.


“Como organización-refirió Yorg- TECNICOOP utiliza sus recursos humanos para contribuir a instaurar una alta calidad educativa y en ese sentido es dable instituir una fuertísima alianza estrategia educativa a partir, precisamente, de la reciente firma de una Carta de Intensión con el gobierno para superar el déficit existente en materia cooperativa”.

Señaló el educador que “quedan pendientes por ejemplos el cumplimiento efectivo lo dictaminado por la Ley de Educación Nacional en su articulo Nº 90 en cuanto al ProDeCoop-Escolar en los establecimientos formoseños, y en la Universidad la propuesta de Cátedra Abierta de Administración y Derecho Cooperativo para fortalecer la formación de grado y posgrado de los futuros profesionales que carecen de estos saberes relevantes”.

Alianza estratégica educativa

“A nivel nacional-referenció Yorg- se han dado este tipo de alianzas entre el sector cooperativo del agro y el Gobierno que nos indican claramente que es posible articular acciones benéficas en materia educativa en beneficio del pueblo”.

“Pero para que estas acciones-prosiguió Yorg-tengan una benéfica concreción en las aulas formoseñas, es decir, para que todos los proyectos y programas educativos cooperativos en todas sus faces reporten resultados positivos se requieren destrabar muros burocráticos dañinos”, cerró afirmado.