sábado, 27 de febrero de 2010

Enfoques cooperativos; Hoy: Carrizosa aboga por la cooperativización masiva del campesinado paraguayo.


Por José Yorg, el cooperario

Por el periódico virtual Última Hora tomamos conocimiento, con gran sorpresa agradable de las declaraciones del titular del Congreso paraguayo, senador Miguel Carrizosa, quien expuso que “la cooperativización masiva de pequeños agricultores es la solución para llevar a cabo una verdadera reforma agraria”.

Y por si fuera poco, el senador Carrizosa remató "No sé por qué le siguen buscando la vuelta". La verdad sea sacralizada, nosotros también nos preguntamos al unísono con él.

Partimos de la realidad y volvemos a ella siempre, y por eso insistimos en la cooperativización del campesinado, no desde una posición enfermiza o utópica, más bien enancado en resultados devenidos del análisis de la ciencia económica.

Si el factor de la producción “tierra” es escaso y la demanda es amplia y creciente, además de otros factores que inciden, como la necesidad de modernización de la producción y distribución, basada en organizaciones asociativas competitivas que promuevan una actitud de respeto a la naturaleza y a la mejoría social, es evidente que la cooperativización es la respuesta a esa realidad.

¿Es una voz en el desierto la del senador Carrizosa?, ¡No señor, de ninguna manera!

Seguramente los miles y miles, millones en realidad, de cooperativistas en el mundo celebramos esta oportuna declaración política de enorme relevancia que… ¡no debe ser desoída por quienes tienen la responsabilidad histórica de llevarlo a cabo ya!

Por lo tanto, ratificamos en un todo lo expuesto públicamente sobre la cooperativización por recobrar una vitalidad enorme a partir del pronunciamiento del senador patriaqueridista Carrizosa,

Cuando hablamos de reforma agraria ¿de que hablamos?

Hablamos de la promoción e implementación de un “Plan Nacional de Reforma Agraria Integral, Sustentable y Solidaria con Base Cooperativa”.

Lo dije con anterioridad y lo repito ahora y aquí mismo: La reforma agraria es una necesidad objetiva de las condiciones latifundistas improductivas y mal habidas, confirmada por la ciencia económica que nos indica que el campesino sin tierra debe poseer el recurso que lo identifica y es su razón de ser en la sociedad, cual es el de ser un productor de alimentos.


Las posibilidades para la Reforma Agraria con Base Cooperativa van a depender de cómo se establezcan los diálogos y acuerdos entre los campesinos, entre los ganaderos y terratenientes y el propio Estado. Y esto dependerá también seguramente de cómo se resuelvan las tendencias antagónicas, pero todos tendrán que entender que este problema social y político no nació del seno campesino.

Y si tenemos presente que es menester evitar la dispersión de esfuerzos y desvíos de propósitos de la propia reforma agraria, cual es la de dotar al campesino de tierra, éste no debe estar tentado a malvenderla. La propiedad cooperativa aparece como la mejor opción.


También es necesario que tomemos en cuenta la historia productiva paraguaya proveniente de la etapa de Nación Independiente, fundada por el Dr. Gaspar Rodríguez de Francia y continuada por los López, como elaboraciones para poder comprender nuestro presente,…presente de inequidad, demandante de cambios.


El histórico momento en el que ahora se encuentra Paraguay brinda la invalorable oportunidad de encarar una estimación retrospectiva de ese momento histórico fundante de su nacionalidad sostenido en un proyecto independiente y moderno, frustrado sangrientamente, sin embargo, brinda la oportunidad de construir un nuevo proyecto reivindicativo, convocante del esfuerzo de todos los hombres y mujeres de buena voluntad.

La estructura agraria paraguaya, históricamente devenida del despojo, posee una elevada concentración de la tierra que fomenta la irritabilidad y la insatisfacción social, impidiendo en consecuencia, una convivencia social y económica verdaderamente democrática, amén de ser una estructura altamente ineficiente y paralizante que desalienta la voluntad de producir, al contrario, fomenta la sustracción y destrucción de la naturaleza con fines de obtención fácil y rápida ganancia como práctica antisocial.


Por tanto, afirmamos que la promoción e implementación de un Plan Nacional de Reforma Agraria Integral, Sustentable y Solidaria con Base Cooperativa, entonces y de manera categórica, constituye una herramienta social, económica y política de urgente diligenciamiento para hacer realidad un dichoso regreso a la tierra.

La educación y capacitación empresarial cooperativa constituye el instrumento imprescindible, sin ella, todo será en vano, lo testifico.

Esta posición proclamada por un cooperativista con visión latinoamericanista, enfatiza, en particular, el método de la práctica de la cooperativización voluntaria y gradual, ¡¡jamás debe imponerse contra la facultad del campesino!!



¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

jueves, 25 de febrero de 2010

Las escuelas deben albergar al cooperativismo, afirmó José Yorg


El Prof. Lic. José Yorg con sus alumnos en periodo de recuperación se ratifica en su afán de implementar el cooperativismo escolar como motores de una formación emprendedora que permita a los educandos organizarse cooperativamente para aniquilar sus debilidades en una sociedad inculcada en el individualismo.

“Al estar nuevamente en contacto directo con la escuela y su realidad, no hacemos más que corroborar la imperiosa e impostergable necesidad de que las escuelas alberguen al cooperativismo”, comenzó diciendo el prestigioso educador cooperativo ante la requisitoria periodística sobre su actual labor.

Apuntó Yorg que “los docentes de las escuelas desconocen las virtudes pedagógicas, didácticas y organizativas del cooperativismo y este hecho priva entonces de poseer una herramienta eficaz en el trabajo áulico e institucional que merita la reflexión de las autoridades correspondientes a fin de revertir esa carencia”.

Precisamente, en una reunión preparatoria del ciclo escolar del presente año al analizar las actividades cotidianas de la escuela con sus jornadas de tareas de lunes a viernes, y su organización general, hemos expuesto que la educación cooperativa escolar está asentado en el articulo N° 90 de la nueva ley nacional de educación y es, por tanto, de inexcusable cumplimiento por parte del Estado”.


Postítulo Docente en Cooperativismo Escolar

En otro tramo de su exposición el Lic. Yorg resaltó la iniciativa de las autoridades educativas de la provincia de Misiones “al poner en marcha un Postítulo Docente en Cooperativismo Escolar, que otorga una valoración en Junta de 2,50 puntos a docentes de todos los niveles educativos, lo que revela la visión estratégica educativa del gobierno misionero”.

A modo de síntesis dijo Yorg que en un reciente articulo periodístico el Dr. Roberto F. Bertossi, catedrático de Córdoba se interrogaba:“¿la Educación Cooperativa irá a la Escuela?”,realizando una magnifica exposición sobre la temática, rematando Bertossi que “ganemos la esperanza de que los preceptos legales educativos aludidos y vigentes, que nuestras mejores prácticas cooperativas ya no volverán a empantanarse en `meras buenas intenciones, omisiones e ineficiencias; que las nuevas paritarias docentes incluirán también este núcleo temático como de la mayor importancia y excelencia, cerró.

domingo, 21 de febrero de 2010

Enfoques cooperativos; Hoy: “¿Hacia donde vamos en materia educativa?”


El Prof. Yorg y sus educandos de escuelas marginales de Formosa.

Por José Yorg, el cooperario

La eminencia del inicio de clases y las tareas previas que realizamos los docentes nos llevan-reiteradamente- a reflexionar sobre la labor educativa, los contenidos, los métodos y los objetivos, confrontando con los resultados generales.

Las recetas educativas-insólitas por cierto-de parte de organismos internacionales vinculados fuertemente a las finanzas de opresión han fracasado, cuyas consecuencias están a la vista, y al decir de José Ingenieros,”han creado generaciones de mediocres”

Mucho es lo que se ha escrito sobre la temática y gracias a ello se pudo develar las nefastas intenciones y contrarrestar la arremetida neoliberal y su proceso cultural del “no se puede”, del vaciamiento pensante de los pueblos latinoamericanos.

Una cosa sigue vigente pese a estar en procesos democráticos: la ausencia de una educación liberadora.

Se habla de educación crítica y demás yerbas pero los maestros y profesores en la práctica no pueden ejercer libremente la libertad de cátedra con lo que se perpetúa la asimetría educativa, además, en contextos de pauperización de ambos: docentes-educandos.

Entonces, actualmente…hoy, en vísperas del inicio de clases… ¿hacia dónde vamos en materia educativa? Hacia la creatividad, hacia el desarrollo pleno de nuestras potencialidades o por el contrario, hacia la mediocridad, la alineación y el adormilar de las conciencias masivas.

Por mi parte, tropiezo nuevamente con la misma piedra, y repito al unísono lo expresado públicamente “En la duración de nuestra experiencia educativa durante los más de veinticinco años en el sistema de educación común, nos interrogamos sobre la manera en que hemos resistido a la mediocridad, construyendo al mismo tiempo conciencia critica y social, admitiendo sí, que es duro saber que en todos esos años se nos haya tratado con irrespetuosidad, salvando lógicamente a las excepcionales autoridades educativas que meritaron nuestro sacrificio, esfuerzo y entrega.

Entonces rememoro…y extraigo retazos de un libro en preparación en el período en que Ana María y yo, José, desplegamos nuestra actividad educativa, iniciado en el ámbito rural de las campiñas formoseñas.

“Caminos polvorientos”.

El ámbito rural posee características peculiares para el desarrollo de la educación y esa peculiaridad refleja contradicciones en la que el maestro debe, sin embargo, planificar, organizar, crear, perseverar, caerse y levantarse e inspirar con el ejemplo personal y profesional, construyendo su éxito cotidiano de dar clases.

La escuela rural crea vivencias imborrables en las mentes y corazones de quienes transitamos esa experiencia, igualables sólo a las de los educandos, aunque ellos y ellas evoquen con mayor brillo y coloridos esas vivencias.

Inigualable experiencia resulta, por ejemplo, en la cotidianidad, la llegada y partida de los ómnibus, momentos en que todo se paraliza y alumnos y maestros enfocamos miradas curiosas para captar a quien desciende o sube en medio de una generosa nube polvorienta que todo lo cubre y luego, con paciencia se desvanece.

Pero esos caminos polvorientos tienen otro rostro en los días lluviosos en que dificultan la comunicación o el regreso. Asumir que nuestros alumnos son al mismo tiempo niños y trabajadores labriegos, lleva tiempo.

Niños cansados, ansiosos por jugar en los prolongados recreos que pretenden en vano revitalizarlos para la tarea áulica, conspiran impiadosos para desarrollar una educación de calidad que incentiven y nutran mentes y corazones nobles, en cuerpos desnutridos.

Son momentos mágicos, de mucha tensión, en que es necesario extremar la creatividad y la inventiva, para adecuar y ajustar la planificación y el ejercicio de los saberes que sean realmente significativos, aprovechando el gigantesco recurso educativo-formativo y nutricional que ofrece la huerta escolar.

“Yatay” lleva por nombre un paraje, una colonia de agricultores del Departamento Laishi de la Provincia de Formosa donde se gestó las ansias de buscar otra alternativa educativa a una realidad lacerante: la estructural pobreza rural.

Asombrados escuchamos por vez primera los vocablos “cooperativismo escolar” que generosamente nos obsequiara la Supervisora Escolar Lidia Frederich de Acuña a quien conocimos haciendo “dedo” en medio de la polvorienta ruta y nos “levantara” con su vehiculo para llegar a la escuela en que fuimos designados. Corrían los días del año 1983.

¿QUÉ NOS INDUJO A ADHERIRNOS AL COOPERATIVISMO EDUCACIONAL?

Nuestra experiencia educativa en las campiñas formoseñas nos enseñaron que el niño campesino requiere una enseñanza emancipatoria. Año tras año observamos como maestros rurales la disgregación de la familia campesina en contrapartida a nuestros esfuerzos educativos, sin efecto positivo.

Buscando una alternativa educativa que respondiera a tal necesidad, encontramos en el cooperativismo Educacional la respuesta pedagógica y didáctica más oportuna e imprescindible.

La familia campesina encara una producción individualista y fragmentada, esta situación material conlleva tener una conducta cercada que se reproduce a su vez en los hijos. Esta condición parcelada lo coloca desde el punto de vista empresarial con deficiencias tecnológicas, de acumulación de capital productivo, en definitiva, en una posición de debilidad organizativa frente a los acopiadores quienes le fijan el precio de su producción anual, frecuentemente de manera desventajosa para sus intereses.

La educación común no tiene respuesta para superar esta situación de perpetua inferioridad organizativa, económico-social, proveniente, precisamente del modo de producción individualista, al contrario la consolida porque es ajena a esa realidad que requiere cambios.

Nuestra práctica educativa rural nos llevó a reflexionar y analizar críticamente la realidad del educando rural, buscando decididamente corregir o cuanto menos contribuir a disminuir los efectos negativos del individualismo campesino que actúa en su desmedro.

El problema de la propiedad privada rural es cada vez más incierto, imponiéndose en consecuencia la búsqueda y encuentro de otros tipos de propiedad que contenga a las familias campesinas, evitando situaciones de explosión social.

El Cooperativismo Educacional posee los atributos pedagógicos y didácticos mediante los cuales el proceso enseñanza-aprendizaje puede trasformar percepciones, actitudes y valores que conmuevan la relación de producción individualista del campesinado, llevándolo a un estadio superior: la producción cooperativa.


¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

viernes, 19 de febrero de 2010

Postulan fortalecimiento del cooperativismo a partir de la movilidad de los recursos humanos cualificados en la materia.








El Lic. José Yorg plantea a altos funcionarios del gobierno una readecuación profesional de su equipo en bien de una potente política pública hacia el cooperativismo provincial.

El equipo de profesionales universitarios que preside el Lic. Yorg ha encarado un plan de dialogo con diversos funcionarios de los altos estamentos de la provincia a fin de exponer la importancia de otorgar un capitulo de relevancia al cooperativismo en los planes estratégicos de Formosa,”todo ello fundado en nuestra experiencia organizacional”, comentó el prestigioso docente.

Sobre el particular refirió Yorg que “nuestra labor educativa cooperativa se ha visto renovada e incrementada en su calidad académica toda vez que hemos alcanzado un nivel de estudio superior, lo que induce necesariamente a exponer este tema fundamental al gobierno, entendiendo que la movilidad de servicios profesional de las personas que trabajamos en áreas relacionadas son una parte esencial del éxito de las políticas publicas”.

“Por tanto-continuó Yorg-, ante la situación actual, consideramos que el principio de movilidad laboral en la administración pública es un aspecto relevante a considerar en la aplicación de políticas estratégicas de eficiencia para la gestión de recursos humanos con miras a la Formosa 2015 en el capitulo de cooperativismo”

Equipo Profesional
de Coordinación Pedagógica


“Nuestros planteamientos ante los funcionarios-explicó el Lic. Yorg- atiende la finalidad de coadyuvar a la obtención de una mayor racionalidad y eficiencia en la administración pública puesto que nosotros estamos como maestros de grado y sin embargo somos profesionales universitarios altamente cualificados lo que constituiría una debilidad institucional provincial que requiere su adecuado equilibrio con las necesidades funcionales y operativas de los organismos ligados al cooperativismo”


A modo de síntesis expuso el profesional cooperativo que “la provincia requiere imperiosamente de la conformación de un Equipo Profesional de Coordinación Pedagógica del cooperativismo y por ello hemos solicitado a la Sra. ministra de educación, Lic. Comello una entrevista pedagógica tendiente a normalizar todos estos asuntos”, cerró expectante.

lunes, 15 de febrero de 2010

Enfoques cooperativos,Hoy: ““El accionar del Cooperativismo del Siglo XXI signará una época de redención humana.”


Por José Yorg, el cooperario

Los grandes pensadores de la cooperación de los siglos XIX y XX nos han legado inmensas enseñanzas, teorías y reflexiones verdaderamente formidables, y han guiado el accionar cooperativo en escenarios diferentes a los que hoy enfrentamos, aquí en este punto es cuando debemos enfrentar esta realidad y emprender la construcción del Cooperativismo del Siglo XXI.

El accionar del Cooperativismo del Siglo XXI signará una época de redención humana toda vez que posee los atributos doctrinales, teóricos y metodológicos suficientes para ello, claro que tal accionar será realidad si el Movimiento Cooperativo supera sus limitantes que la paralizan.

Recurro nuevamente a los magníficos conceptos de Osvaldo A. González Salinas para graficar con certeza la actitud cooperaria imprescindible del siglo XXI: “Sucede con el Cooperativismo, lo que en los primeros años del Cristianismo: La doctrina solo se difundía entre los iniciados, en las catacumbas. No se animaban a salir a propagar la nueva fe los cristianos por temor a los poderosos intereses que se opondrían y de ese modo se limitaba voluntariamente en Cristianismo.”

La gigantesca calamidad humana que toda la actual civilización enfrenta es definitiva, o nos encaminamos hacia un nuevo paradigma de producción y distribución equitativa o entraremos en la era de peligro de extinción de la especie humana.

Si esta verdad a la vista es asumida con el requerimiento y urgencia que reclama, el cooperativismo debe “salir de las catacumbas” como bien nos reclama González Salinas, pues los fundamentos cooperativos deben seguir evolucionando con el aporte de la metodología apropiada- inexistente en la era fundacional- que la llevaran a expresar toda su potencialidad que aun lleva en su interior.

“Sin pretender colocar en un plano de igualdad histórica, entre cristianismo y cooperativismo, ni mucho menos, filosófica, ambos hechos, diríamos que es hora de que el Cooperativismo salga de las catacumbas y se lance a la calle, porque tiene la suficiente madures como para disputarla y la necesaria solidez filosófica como para ofrecerse como alternativa viable”. Osvaldo A. González Salinas

Es lo venimos insistiendo, el cooperativismo debe realizar una ruptura episódica y avanzar para su desarrollo pleno a su etapa del siglo XXI.

Con modestia pero con firmeza reclamo analizar el destino del cooperativismo en correlación a otros postulados filosóficos y científicos que tienen como finalidad el mejoramiento humano, y que en ese sentido nos percataremos-sin dudas- que el cooperativismo no alcanzó aun el desarrollo científico que encierra sus grandes verdades.

Huelga señalar los gigantescos avances científicos-tecnológicos que han conmovido toda la existencia en nuestro mundo, sin embargo y vergonzosamente esos adelantos no han significado mejor bienestar, todo lo contrario, son atentatorios a la existencia de la especie humana.

Corregir esos males sociales devenidos de un esquema que profundiza y eterniza injusticia requiere antes que nada de un planteamiento teórico certero que ilustre convenientemente las soluciones más racionales y que todos entendamos como justas e imprescindibles.

Es que la propia realidad cotidiana en que se desenvuelven las cooperativas en todo el universo con sus peculiaridades locales encaran realidades que claman nuevas teorizaciones, a decir verdad, continuidad y crecimiento teórico que orienten con certeza su accionar solidario y redentor.

Las aportaciones que exige la construcción del Cooperativismo del Siglo XXI estarán en perfecta sintonía por las necesidades de la práctica cooperativa que se encuentra trabada, y digo “trabada”,”demorada”,reclamante de aportaciones de inteligencia, estudio y reflexión para liberar su interior potencial, no aludo en modo alguno a obsolescencia, sin dudas.

Alguien pudiera aludir al éxito económico-financiero alcanzado por diversas cooperativas aquí y allá, pero eso es más de lo mismo, más allá de lo destacable, es decir, se estableció claramente en los tiempos fundacionales que el cooperativismo es mucho más que una forma de organizar la producción de bienes y servicios, es antes que nada una nueva forma de organizar la sociedad para hacer la vida digna de la especie humana.

Entonces, como bien nos alecciona Paul Lambert, “ciencia y doctrina no se contraponen, son complementarias”, he allí la esencia del accionar del Cooperativismo del Siglo XXI que signará una época de redención humana.


¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

jueves, 11 de febrero de 2010

Enfoques cooperativos,Hoy: “El Buen Vivir…como corresponde”


Por José Yorg, el cooperario


En verdad, a fuerza de mucha insistencia y esfuerzos denodados se está logrando irrumpir con un renovado paradigma: El Buen Vivir.

En efecto, el Presidente de la Confederación Nacional de Comunidades del Perú Afectadas por la Minería (CONACAMI), en el Foro sobre el Buen Vivir de los Pueblos Andinos realizado el mes anterior en el Congreso de la República del Perú, expuso que “a partir de estas tesis del buen vivir, este nuevo paradigma, los pueblos indígenas hemos empezado a cuestionar, a rebatir algunos conceptos sobre los que se cimienta el capitalismo occidental”.

Debemos admitir que el mal llamado neoliberalismo logró instalar en la población la cultura del sufrir cotidianamente como lo son la falta de agua, de trabajo, de salarios dignos, de buena atención de la salud, de recibir excelencia educativa, entre otras necesidades insatisfechas en razón del verso de la crisis.

Nos acostumbraron a pasarla mal y ver esto como natural, inevitable, eso sí los gobernantes y políticos profesionales sí pueden y lo hacen, pasarla bonito, todo el tiempo.

El tradicional asadito, hoy por hoy es un grato recuerdo de mejores tiempos.

Hablando de tiempo, en verdad es tiempo de recobrar la dignidad, porque el vivir bien hace a la dignidad humana, en el sufrir necesidades no hay nada de virtud.

Las ciencias están para corregir los desvíos o errores que provocan desastres económicos que luego caen sobre las sufrientes espaldas de los desposeídos.

Esta renovación cultural viene de los más esquilmados de la tierra: de los aborígenes.

Leí también en un periódico virtual paraguayo con mucha atención lo manifestado por Don Indalecio Vásquez de 78 años, quien con énfasis afirmó que “el Gobierno debería cuidar más a la gente”.

Allí está el meollo de la cuestión, los gobiernos han instalado el Estado ausente, el Estado que no busca el bienestar general, la felicidad del pueblo, se han olvidado, simplemente.

El cooperativismo se sostiene y se fundamenta en la formula simple pero contundente:”Esfuerzo propio y ayuda mutua”.

El pueblo debe conocer las maravillas del cooperativismo, más allá de las falencias que vergonzosamente exhiben algunas cooperativas, toda vez que este movimiento social y económico tiene las cualidades formativas que predispone al hombre y a la mujer a organizarse sobre otras bases que tienen que ver con la construcción de un mejor y más justo mundo.

Una vez un político formoseño ante el requerimiento de su opinión sobre la labor de TECNICOOP en su accionar educativo en bien de la sociedad enmarcado en impedimentos permanentes a su noble labor educativa cooperativa desde el sector gubernamental, expuso que “a TECNICOOP ya no es posible pedirle más sacrificios”.

Hoy decimos nosotros… ¡al pueblo ya no es posible pedirle más sacrificios!

Los padecimientos que producen la crisis energética y de acceso a agua potable desnudan la falta de previsibilidad y acercan en consecuencia a la respuesta colectiva del 2001 cuando el pueblo se pronunció con el ¡¡¡que se vayan todos!!

¿Estaremos en los albores de un tiempo de cambio impulsado por el hartazgo social del padecimiento inútil?

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

miércoles, 3 de febrero de 2010

Enfoques cooperativos.Hoy: “Intensa actividad política…de los políticos.”


Por José Yorg, el cooperario

Escuchando un reportaje por radio, mientras disfrutaba de un tereré bien mbareté, hace un tiempo ya, y no recuerdo con exactitud, me llamó la atención una frase que propinó el prestigioso sociólogo Tomás Palau sobre la cuestión política en la población paraguaya, contestando algo así como “existe en realidad intensa actividad política, de los políticos, pero no así de la ciudadanía, pues el pueblo está muy preocupado por los problemas que le aquejan día a día sin solución”.

Más allá de las diversas disquisiciones que pudiéramos realizar sobre el aspecto político característico del ser humano como tal, el asunto apunta a resaltar hasta qué punto la inmensa mayoría de los políticos ejercen ese oficio con interés creciente en provecho propio y detrimento de las necesidades del pueblo.

Pareciera que los políticos vivieran en una burbuja, o como se decía antes, se traban en meras discusiones interminables de café.

Los grandes temas de interés general como ser la lucha frontal contra el desempleo, la salud, la educación, la inclusión productiva de los campesinos sin tierra y tantos otros temas, son literalmente postergados.

¿Qué modelo productivo necesita el Paraguay? ¿Qué plan de impacto a fin de quebrar el subdesarrollo y marginalidad socio-económico se presentan y debaten en el Congreso?

¿Qué plan se estudia para repatriar a miles y miles de paraguayos que emigraron por diversas razones y que en tales circunstancias han adquirido talentos en oficio y profesionalidad universitaria?

¿Hacia qué plan de reforma política es necesaria avanzar para instaurar un prospero y justiciero Paraguay?

La democratización educativa y de la salud a partir de congresos pedagógicos y salubridad social, con efectiva y amplia participación, son sin dudas, materias pendientes que explican el desapego hacia los intereses del pueblo.

Y qué decir de una renovación o cuanto menos de un giro y apego a los principios del derecho por parte del estamento de justicia para que renueve el respeto hacia estas instituciones, quebrando las sospechas que la agravian y escarnecen.

Los estamentos del Estado a los ojos del pueblo están seriamente cuestionados.
Dice un dicho que “la injusticia rebela a los hombres, la justicia los hace mansos”.

Una mirada al Movimiento Cooperativo

¿Y el cooperativismo tiene en estos asuntos algo que decir y hacer?

¡Tiene, el Movimiento Cooperativismo, mucho que hacer!

El cooperativismo es un movimiento universal que se rige por valores y principios que son guías estratégicas para su desenvolvimiento eficaz en la sociedad en aras de su pacifica transformación socio-económica.

Esos principios son: Adhesión voluntaria y abierta, Gestión democrática por parte de los asociados, Participación económica de los asociados, Autonomía e independencia, Educación, formación y capacitación, Cooperación entre cooperativas, Interés por la comunidad.

Tomaremos tan sólo dos de ellos-en esta ocasión-para sostener nuestra tesis, los principios de Interés por la comunidad y Autonomía e independencia, el primero de ellos implica de manera contundente que “Las cooperativas trabajan para conseguir el desarrollo sostenible de sus comunidades mediante políticas aprobadas por sus asociados”.

El segundo principio tomado- Autonomía e independencia- como muestra de cuanto afirmamos dice “Las cooperativas son organismos autónomos de autoayuda, gestionadas por sus asociados”, es decir, no dependen de gobiernos, ni de corporaciones. Pero ello no implica alejamiento del manejo estatal de la cosa pública, al contrario, es de su interés, y mucho.

El incremento de las tensiones y cruces de contrapuestos ataques entre referentes de los poderes del Estado evidencian una profundización de intereses irreconciliables, en perjuicio del pueblo.

El pueblo desea cambios propicios para su bienestar, bien merecido.

El Movimiento Cooperativo no puede ni debe mantener una actitud pasiva e indiferente, por el contrario, puede y debe tomar una actitud protagónica, pues cuenta con cuadros intelectuales de primer orden y además con la moral y ética suficientes para hacerse escuchar e incidir en las públicas políticas benéficas.

El cooperativismo cuenta con un gigantesco bagaje de conocimientos y saberes socialmente validos como para brindar análisis y reflexiones para incitar a las mejores mentes y corazones a aunar esfuerzos en construir una Patria justa y soberana que ya es tiempo de disfrutar.


¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

Solicitud de audiencia pedagógica a Comello genera expectativas y aspiraciones a Yorg y su equipo.


El Prof. Juan Velázquez elevó solicitud de audiencia pedagógica ante el Ministerio de Educación de la Provincia de Formosa.

Ante el inminente inicio del ciclo escolar 2010, prestigiosos docentes cooperativos solicitaron a la Ministra de Educación de la Provincia, Lic. Olga Comello, “una audiencia pedagógica cooperativa a fin de buscar y encontrar mecanismos que viabilicen la educación cooperativa tal lo estipula la ley de educación nacional”, y agregaron que “tal posibilidad les genera expectativas y aspiraciones a Yorg y su equipo”, aseguraron.

“La solicitud de entrevista interpuesta recientemente-dijo el Prof. Juan Velázquez-, planteada a la ministra desde el punto de vista de la profesionalidad que nos determina, es decir, como recursos humanos en la materia con que cuenta Formosa nos anima el deseo de aportar para la elaboración y practica educativa en el ámbito oficial educativo”.


Sostuvo Velazquez que “el equipo de profesionales universitarios que preside el Lic. Yorg ha resaltado a la ministra de Educación que tiene gran interés en verle respondiendo a la reciente aprobación de la Resolución de las Naciones Unidas –ONU-que Declaró al año 2012 Año de las Cooperativas, y sugiere a los gobiernos y movimientos cooperativos aunar esfuerzos en ese sentido”.

Equipo Profesional
de Coordinación Pedagógica


Aseveró Velázquez que la elaboración de un Programa de Educación cooperativa escolar viene dada por la necesidad de contar con un instrumento que facilite la tarea de elaboración, ejecución, orientación y evaluación educativa a partir de la constitución de un Equipo Profesional de Coordinación Pedagógica que ponga en marcha un proceso gradual y que de tal modo garantice calidad en su desempeño”.

“La ministra de Educación será quien concrete cómo se lleva a cabo esa tarea de elaboración, ejecución, orientación y evaluación educativa, tarea a la que nosotros exponemos nuestros modestos aportes a fin de que la gestión encuentre éxito”, cerró.